Instrucciones

Las instrucciones son para 4 porciones. Modifícalas según sea necesario.

1. En un tazón pequeño, mezclar el vinagre, la cebolla en polvo y el estragón.
2. Colocar las yemas en un recipiente alto y estrecho resistente al calor. Con una batidora de mano, batir las yemas hasta conseguir una mezcla suave.
3. A fuego medio-bajo, derretir con cuidado la mantequilla en una cacerola o en un microondas (no dejar que se caliente demasiado; deberías poder poner el dedo dentro sin quemarte). Se formará una proteína blanca de leche en el fondo de la cacerola proveniente de la mantequilla derretida; evita usarla en la receta.
4. Añadir lentamente la mantequilla a las yemas batiéndolas con una batidora de mano a velocidad baja. Cuando la salsa comience a espesarse, aumentar la velocidad hasta que toda la mantequilla se haya combinado con las yemas. Entonces, agregar la mezcla de vinagre y especias y batir hasta que esté combinada. Salpimentar al gusto.
5. Para mantener la salsa caliente, añadir algo de agua a una olla que sea lo suficientemente grande como para que quepa el recipiente de la salsa bearnesa. Llevar a ebullición a fuego fuerte y después retirarla del fuego. Mantener el recipiente de la salsa bearnesa en el agua; así se mantendrá caliente mientras se prepara la carne.
6. Freír en una sartén o parrillar la carne a tu gusto: poco hecha, al punto o bien hecha. Servir con la salsa bearnesa y una ensalada generosa.