Después de muchos años como una persona con sobrepeso, Carol ya había tenido bastante. Justo cuando lo necesitaba, una amiga le habló sobre la dieta cetogénica, y ella decidió probarla. Ella habló sobre ello a su familia y no tardaron mucho en unirse. Esta es su historia:
Me encanta Diet Doctor. De hecho, siento que Diet Doctor ha sido clave para el éxito de mi familia. Lo genial es que da al visitante la oportunidad de aprender todo lo que quiera aprender, y así tomar la decisión de seguir la dieta cetogénica de la forma mejor y más sencilla. Funcionó perfectamente para nosotros. Quiero compartir nuestra historia de éxito.
Conoce a mi familia. Actualmente vivimos en Virginia, Estados Unidos. Estos son Dean, 55: Carol, 57; Nicke, 24; Cassandra, 23; Wesley, 17; Alec, 27; Blake, 30; Zac, 21 y Victoria, 26.
Incluyo este gráfico para mostrar la pérdida de peso de cada persona:
(Nick empezó super esbelto. Victoria ha estado embarazada/en lactancia desde que empezamos keto. Mi nieto ha ganado 9 kg (20 lb)).
Pedí a mi marido que me ayudara a describir mi vida como una persona obesa. Él usó la palabra “paralizada”. Permití que la obesidad me impidiera disfrutar totalemente mi vida. Me veía a mí misma como “repugnante” y me preguntaba cómo podía gustar a la gente. Como familia, éramos activos y divertidos, pero a menudo no participaba totalmente. Me perdí muchas fiestas, salidas, actividades e incluso amistades.
Crecí solo con un ligero sobrepeso. Me consideraba “gorda”, pero podía fácilmente perder 2-4 kg (5-10 lb) pasando hambre durante unos días. Descubrí como arreglármelas con poca comida, y me mantuve relativamente esbelta. Desafortunadamente, después de tener a mis hijos, empecé a ganar peso. No fue por mis embarazos, sino porque empecé a comer cuando preparaba comida para la familia. Si comía, ganaba peso. Comía tan poco como fuera posible, me saltaba muchas comidas y raramente comía postres, pero continué ganando peso. Mi peso máximo fue 106 kg (234 lb), y todo mientras me sentía privada.
Emprendí un viaje espiritual para aprender a quererme a mí misma como persona obesa. Tomó varios años, pero ocurrió. Empecé a comprar ropa y a participar en la vida. Odiaba no estar sana, pero estaba agradecida del cuerpo que tenía. Un día recé para saber qué hacer y sentí que necesitaba llamar a una amiga para qué me dijera qué hacer. Ella me habló de la dieta cetogénica. Estaba incrédula, pero sentí que había sido la respuesta a mi rezo, así que me lancé. Anuncié a mi marido y a mi hijo de 16 años que iba a empezar el viaje keto. Al siguiente día, el 7 de febrero de 2018, empezamos la dieta cetogénica, sabiendo mucho poco sobre cómo hacerla. ¡Me llevó exactamente dos (deliciosas) comidas keto que me siguieran al 100 %!
Necesitaba más información, así que busqué y encontré Diet Doctor. Consumí tanta información como pude durante el siguiente mes (y continúo haciéndolo). Empezamos —y nos encantó— el reto de dos semanas, pero estábamos en el momento en el que no podíamos comer más de dos comidas al día.
El uno de abril, en nuestro encuentro familiar por la pascua, los tres estábamos enamorados con keto. Nos sentíamos de maravilla. ¡Los ronquidos de mi marido desaparecieron! Dejó las medicinas de la hipertensión y el colesterol. ¡Las alergías de mi hijo desaparecieron! ¡Mi terrible acidez estomacal y problemas de estómago (20 años de dolor de estómago) se esfumaron! Quedamos impresionados y maravillados de los resultados positivos que no esperábamos. Pasamos mucho de nuestro tiempo hablando sobre keto e incluso compartimos algunos platos keto.
Mi hijo mayor, que tenía aproximadamente 34 kg (75 lb) de sobrepeso, lo probó sin ni siquiera decírmelo. Lo hizo por una semana y paró porque era difícil en sus condiciones de vida. Al final de la semana en la que dejó keto, había tomado la decisión de volver a hacerlo. Se dio cuenta de lo terrible que se sentía a diario (también tenía problemas de estómago) y lo mucho mejor que se sentía con keto. Ha pedido 23 kg (50 lb) hasta ahora y le encanta.
Mis otros hijos se unieron uno a uno. Hemos disfrutado mucho trabajando en esto juntos. Mi hija, que no puede hacerlo totalmente ahora porque su bebé está en periodo de lactancia, ha sido fundamental en ayudar a otros a empezar.
Nos mudamos después de un mes y medio haciendo keto, así que perdí peso entre gente que no sabía que era una persona obesa. Soy una persona totalmente nueva. Tengo un trabajo muy activo, y de verdad que me siento cómo cuando estaba en la veintena. Trabajo mayormente con gente más joven, y puedo fácilmente seguir su ritmo.
Varias personas me han preguntado cómo fui capaz de que mi hijo más joven coma así. Lo irónico es que él ha sido el más entusiasta con keto. Descubrió que cuando come carbohidratos, sus alergias vuelven, así que come con mucho cuidado. Ha ganado mucha confianza y disciplina personas que se ha vista reflejada en el resto de su vida. Justo a tiempo para su paso a la universidad.
La pérdida de peso solo ha sido una pequeña parte de los beneficios del estilo de vida keto para nosotros. Todos nos sentimos genial y saludables. Sin embargo, el mayor beneficio, en mi opinión, es nuestro nuevo conocimiento de cómo controlar nuestras vidas y cuerpos. Con la información correcta, estar saludable es fácil. Algunos aún tenemos algo de peso por bajar, pero incluso cuando lleguemos a nuestros objetivos, seguiremos comiendo keto por los beneficios para la salud.
¡Gracias a todos los que enseñan tan bien en tu sitio web!
De forma alternativa, usa nuestra guía cetogénica, o, para una sencillez máxima puedes usar nuestro menú cetogénico de 14 días con deliciosas recetas para mantenerte durante dos semanas.
¿También tienes una historia de éxito que quisieras compartir en este blog? Mándala (se aprecian las fotos) a kim@dietdoctor.com. Por favor, hazme saber si está bien publicar tu nombre y foto o si prefieres ser anónimo.
Sería genial si pudieras incluir información sobre qué comes en un día típico, si practicas o no ayuno intermitente, etc.