Cómo Deborah aprovechó una cirugía de cadera para cambiar de hábitos

Hace un par de años la cadera derecha de Deborah de repente dejó de funcionar y tuvo que operarse. Tras la cirugía, se preguntó cómo podía haber dejado que el peso se le fuera de las manos. Se prometió a sí misma bajar de peso y recomponer su cuerpo. Esta es la historia de Deborah:

El 21 de mayo de 2017 la cadera derecha me dejó de funcionar de forma repentina. No podía andar sin ayuda de un bastón o un andador. Antes de esto, trabajaba a tiempo completo como enfermera en un hospital comarcal en el departamento de informática y pasaba horas sentada frente a la computadora.

Busqué tratamiento traumatológico y dos médicos diferentes me dejaron claro que los problemas y el dolor solo podrían solucionarse con una prótesis articular.

El 27 de septiembre de 2017, el día en que me operaron para ponerme la prótesis articular, pesaba 90 kg (198 lb). ¡Tenía 64 años y no hay duda de que pesaba demasiado para medir 170 cm (5’7″)!

¿Cómo permití que el peso se me fuera de las manos? Estaba asustada y triste, pero también muy motivada para volver a controlar las piernas. Después de que la cirugía de cadera y la terapia física inicial fueran un gran éxito, me prometí a mí misma que iba a bajar de peso, ponerme fuerte y ser valiente. ¡Empecé a reinventarme! Un verdadero cambio para mí.

Me apunté al polideportivo local, contraté a un entrenador personal y empecé a comer keto en la segunda semana de febrero de 2018.

Me llevó tiempo adoptar/adaptarme a keto, tal vez porque había sido un vegana “mala” durante mucho tiempo. Comía montones de carbohidratos; está claro que era adicta a ellos. Empecé a comer de forma keto con solo 20 gramos de carbohidratos, en mayo de 2018 me adapté a comer grasa, y ya no he echado la vista atrás. También comencé a ayunar 22 horas con un intervalo de alimentación de 2 horas 3 días a la semana, y ahora es mi rutina habitual. Hago ejercicio adrede las mañanas que ayuno.

• Estuve medicada para la depresión durante años y, con la ayuda de mis médicos, llevo sin hacerlo ya cinco meses. Tampoco uso otro tipo de medicamentos.
• He perdido un total de 23 kg (40 lb) y he confirmado que he ganado 4 kg (8 lb) de masa muscular. ¡Ahora mi IMC es de 25!
• El pecho me medía 117 cm (46 pulgadas), ahora 102 cm (40 pulgadas)
• La cintura, 114 cm (45 pulgadas), ahora 91 cm (36 pulgadas)
• La cadera, 119 cm (47 pulgadas), ahora 104 cm (41 pulgadas). ¡Todo bien!
• Ahora me sobra energía, puedo caminar sin balancearme ni cojear, estoy más fuerte tanto mental como físicamente de lo que nunca he estado en mi vida.

El pasado septiembre mi familia y yo fuimos de acampada a Virginia Occidental. Mientras caminaba por la ladera de una hermosa montaña con mi esposo y mi hijo de 40 años íbamos riendo, pero se nos saltaban las lágrimas al mismo tiempo. ¡Nunca pensé que veríamos tal día!

Vivo en el noreste de Ohio, me he jubilado con alegría y aún mantengo la licencia de enfermería activa. Tengo cinco nietos y puedo aguantar su ritmo y más, y estoy dando clases de arte para niños y adultos. ¡TODO va bien!

Deborah

Comentario

Guau, es una historia inspiradora. ¡Gracias por compartirla, Deborah, y felicitaciones por todo su éxito!

Saludos,
/ Dr. Andreas Eenfeldt

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